GIRASOLES PARA ELIMINAR RADIACTIVIDAD EN FUKUSHIMA Y CHERNOBYL

Los materiales radiactivos liberados al ambiente pueden causar la contaminación del aire, el agua, las superficies, los suelos, las plantas, anímales, edificaciones y principalmente las personas. La búsqueda de una forma segura de eliminar estos residuos radiactivos a llevado diversos rumbos de investigación y las plantas resultaron ser la alternativa más viable para eliminarlos.

RADIACTIVIDAD

Partamos por conocer que es la radiactividad, de manera sencilla podemos decir que la radiactividad es una energía emitida por ciertos cuerpos, sea de manera natural (radiactividad natural) o provocada por agentes externos (radiactividad artificial).

Es en esta última situación que en la búsqueda de crear energía alternas mas potentes y mas duraderas es que el ser humano llego a desarrollar la ENERGÍA NUCLEAR.

Se cree que esta será la energía del futuro ya que produce energía eléctrica a grandes cantidades, pero el problema es su uso “poco seguro”. Dado que el uranio es altamente radiactivo. Por esto se necesita un cuidado excepcional con sus residuos.

CHERNÓBIL

Según la OMS (Organización Mundial de la Salud) la radiación liberadas por el accidente podría haber costado las vidas de unas 4000 personas más durante los primeros 10 años posteriores al accidente, a causa de cáncer de tiroides y otras enfermedades. Y luego de 30 años ya habían más de 11.000 casos de cáncer.

Uno de los resultados ambientales del accidente, es que las de 4 millones de hectáreas de bosque en el centro de Europa quedaron contaminadas por radiación. Además, se registró un incremento de incendios forestales en la zona de exclusión. Toda la vida fue afectada por este incidente.

FUKUSHIMA

El 11 de marzo del 2011 a las 14:46 el mundo seria testigo de otra catástrofe nuclear. Un terremoto de magnitud 9 tras el cual un tsunami levantó olas de más de 10 metros de alto que causaron muertes y devastación en Japón oriéntelas. A continuación se produjo un accidente en la central nuclear de FUKUSHIMA DAIICHI considerado de grado 7 (accidente grave) El daño provocó fusiones nucleares y una serie de explosiones de hidrógeno.

NATURALEZA Y RADIACIÓN

Sin bien el limite de la zona de peligro no ha cambiado, el paisaje si lo hizo, de donde la gente fue expulsada la naturaleza a tomado lugar. Un gran ejemplo es el “bosque rojo” en Chernóbil, donde las plantas se desarrollaron de una manera más flexible a la radiación.

Ya que las plantas no pueden moverse estas tuvieron que adaptarse a estos nuevos factores. A diferencia de los animales o nosotros, las plantas tienen la capacidad de crear células nuevas de cualquier tipo que la planta necesite. Aunque la radiación también puede causar tumores en los vegetales, las células mutadas no se propagan de una parte de la planta a otra como lo hacen los cánceres.

Esto llevo a los científicos a preguntarse si habrá una forma de aprovechar la vegetación para limpiar o reducir las secuelas de radiación en la zonas afectadas por estos accidentes radiactivos.

LOS GIRASOLES

Girasol es una planta herbácea de la familia asterácea, de nombre científico HELIANTHUS ANNUUS. El girasol recibe este nombre gracias a las propiedades que posee esta planta que le permiten girar en dirección de los rayos del sol (fototropismo), y de esta manera aprovechar de sus virtudes.

Actualmente, es una planta cultivada en un gran número de países gracias a sus diversos aportes alimenticios derivados de sus semillas y de sus propiedades para obtener aceite. Pero además resultó ser una planta capaz de absorber y acumular radiactividad, por lo cual es considerada una planta “fitorremediadora”.

FITORREMEDIACIÓN

La fitorremediación aprovecha la capacidad de ciertas plantas para absorber, acumular, metabolizar, volatilizar o estabilizar contaminantes presentes en el suelo, aire, agua o sedimentos como: metales pesados, metales radioactivos, compuestos orgánicos y compuestos derivados del petróleo.

Gracias a esto la ciencia logro encontrar la planta perfecta para limpiar la radiación, los “girasoles” pueden remplazar las sustancia de las que se alimentan con dos elementos producto de la radiación que son el “cesio” que podía remplazar al potasio y el “estroncio” imita al calcio, elementos que la planta utiliza para la fotosíntesis y como soporte estructural.

Por estos motivos los girasoles son las mejores plantas o flores capaces de absorber la radiación o de llevar a cabo este proceso natural de la fitorremediación.

ESPERANZA CONTRA ACCIDENTES NUCLEARES

“Plantamos girasoles, mostaza de campo, amaranto y cresta de gallo, que se cree que absorben la radiación”, dijo en su día a Reuters Koyu Abe, monje jefe del Templo Budista Joenji, meses después del desastre de Fukushima. “Hasta ahora hemos cultivado al menos 200.000 flores y distribuido muchas más semillas. Desde el desastre, al menos 8 millones de girasoles han estado floreciendo en Fukushima”.

De esta forma el girasol es un símbolo de esperanza para las personas que fueron afectadas por estos terribles accidentes de este tipo. Fueron plantados tanto en Chernóbil como en Fukushima millones de estos ejemplares en contra de estas devastaciones nucleares.

REDACCIÓN: Rubus Garden